Poliki poliki... Salgo con mi segundo de a bordo a una suave trotada por el Cabo de las Huertas: A mitad camino se tercia un baño. La tarde está turbia, venteadita, fresca. Va y se raja: Pero lo necesito. Me sienta increiblemente bien. El agua fría, clara, salada. Nadie la dice a la más guapa que no:
Me encanta la gente que se raja. Hace falta tener mucho valor para rajarse.
ResponderEliminarCierto. Pero te dejas algo por el camino.
EliminarOle ole ole y ole....
ResponderEliminar¡¡¡Que ganas tenía de leerte maestro!!!!
Vivan los "rajaos" y también los "remojaos",....a ver si nos damos una bañá matutina y a tu peque,... lo tiramos al agua entre todos :).
Muchas ganas de verte!
Por la carita que tienes, yo me hubiese quedado con tu hijo!!
ResponderEliminarSaludos mestre